20 de diciembre del 2007
La revista Time acaba de nombrar «personaje del año 2007» al presidente ruso, Vladimir Putin, quien superó en la votación a Al Gore, a la creadora de Harry Potter, al presidente chino y al jefe de las tropas estadounidenses en Irak, de nombre Petraeus.
Time ha olvidado el poder casi dictatorial que ostenta el indudablemente popular nuevo zar de todas las Rusias: la restrictiva, hasta el ahogo, ley de organizaciones no gubernamentales; el sometimiento forzado de la oposición, el nombramiento a dedo de los gobernadores, que elimina la sana práctica electoral; las dudas en la investigación y acusación de la petrolera Yukos y un largo etcétera que inclye su última maniobra para burlar el mandato constitucional y seguir en el poder a través de un presidente testaferro que le nombraría primer ministro (*). Pero la revista justifica su elección de la siguiente manera:
En mi opinión, las razones anteriores son precisamente las que deberían haber servido para que ni siquiera lo nominaran.