Chad: Miles de personas huyen de los ataques de los yanyawid

Londres.- Amnistía Internacional pide al gobierno chadiano que despliegue inmediatamente tropas a lo largo de la frontera con Sudán para proteger a la población civil de los ataques de los yanyawid en el este del Chad.

"De nuevo la población civil es víctima de los ataques de los yanyawid, de nuevo el ejército chadiano no la protege, y la comunidad internacional ni siquiera ha empezado a aplicar los elementos relativos al Chad incluidos en una resolución del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas aprobada hace seis semanas", ha dicho Kate Gilmore, secretaria general adjunta ejecutiva de Amnistía Internacional.

"Estos ataques contra la población civil del Chad nos muestran una vez más la urgente necesidad de un despliegue inmediato de las tropas de mantenimiento de la paz de las Naciones Unidas en Sudán, no sólo para detener los ataques contra la población de Darfur, sino también las incursiones transfronterizas en el Chad".

Amnistía Internacional pide la creación de una presencia de la ONU en zonas clave del Chad y el despliegue de las fuerzas de la ONU en Darfur para controlar las actividades transfronterizas de grupos armados a lo largo de la frontera sudanesa, como pedía la Resolución 1706 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, adoptada el 17 de septiembre.

Según informes conseguidos por la organización, la nueva oleada de ataques en la frontera entre el Chad y Sudán comenzó el 3 de octubre y continúa desde entonces.

Decenas de personas han muerto y unas 3.000 han huido en la última semana, algunas como consecuencia de los ataques contra sus poblados, otras temiendo que los suyos sean atacados. Un campo del ACNUR en Habile en el que viven 3.500 chadianos desplazados ya ha llegado al máximo de su capacidad, y se esperan más ataques.

En los últimos diez días, cerca de una decena de poblados del este del Chad han sido atacados, y en los ataques han muerto al menos 40 personas, entre ellas un imán y sus cuatro hijos en Tamadjour, el 15 de octubre. En Marmadingue, en el cantón de Koloy, hombres a caballo atacaron a los lugareños que trabajaban en sus campos, matando a 22 hombres y a una mujer.

Los lugareños que huían describieron a los atacantes como yanyawids con uniformes del ejército de Sudán.

Al ser época de cosecha, muchas personas desplazadas se aventuran a regresar a sus poblados para intentar recoger sus cosechas, lo cual las deja a merced de nuevos ataques.

"Ya advertimos de que los ataques probablemente se reanudarían una vez terminara la estación de lluvias, como así ha sucedido", ha dicho Kate Gilmore. "Esto se podría haber evitado si el gobierno chadiano y la comunidad internacional hubiera escuchado los avisos y actuado previsoramente para proteger a los civiles en el este del Chad."

"El gobierno del Chad debe asegurarse ahora de que sus ejército patrulla la zona y controla atentamente la frontera para impedir nuevos ataques."