Llamamiento de AI a la presidencia austriaca de la UE

Bruselas.- Uno de los principales retos que se le plantean a la Presidencia austriaca es reafirmar la primacía de los derechos humanos dentro y fuera de las fronteras de la Unión Europea (UE), ha manifestado Amnistía Internacional en las recomendaciones que ha formulado hoy a la Presidencia austriaca en una conferencia de prensa celebrada en Viena.

Ante la presunta participación de Estados miembros de la UE en actividades ilegales realizadas por Estados Unidos en el marco de sus estrategias antiterroristas, Amnistía Internacional ha instado a que al final del semestre no quepa ya ninguna duda de que las detenciones arbitrarias, la reclusión de detenidos en secreto, la tortura y las “desapariciones” no se tolerarán.

"Si la UE quiere conservar la credibilidad de su política en materia de derechos humanos, debe rendir plenamente cuentas de su propio historial” –ha manifestado Dick Oosting, director de la Oficina de Amnistía Internacional ante la Unión Europea–. Aunque en el último periodo se han observado avances en el campo de las relaciones exteriores, existe todavía un tabú con respecto a la actuación de los Estados miembros de la UE en materia de derechos humanos.”

La lucha contra el terrorismo y la migración irregular han adquirido prioridad máxima para la UE, pero se han abordado de una manera que revela la existencia de graves deficiencias en lo que a los derechos humanos se refiere.

“Enfrentada al déficit que presentan sus medidas antiterroristas desde el punto de vista de los derechos humanos y a las operaciones de devolución de detenidos y otros actos ilegales de algunos Estados miembros, la UE ha respondido escondiendo la cabeza”, ha afirmado Dick Oosting.

Amnistía Internacional cree que es hora de que la UE emprenda una revisión exhaustiva de su política en materia de derechos humanos, por lo que hace a la Presidencia austriaca las 10 propuestas siguientes:

Facultar a la Agencia Europea de Derechos Fundamentales para examinar el cumplimiento de las obligaciones de los Estados miembros en materia de derechos humanos.

Reafirmar la primacía de los principios de derechos humanos garantizando el respeto pleno de los derechos humanos en las medias antiterroristas de la UE y asegurarse de que al final de 2006 todos los Estados miembros han ratificado el Protocolo Facultativo de la Convención contra la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes.

Elaborar una política exhaustiva para abordar la situación de los romaníes en la UE.

Reforzar la protección de los derechos de los solicitantes de asilo y los migrantes.

Garantizar que el desarrollo de programas regionales de protección no exime jamás de las obligaciones de protección de los refugiados.

Reforzar la dimensión de las políticas de ampliación y vecindad relativa a los derechos humanos.

Presionar en favor de una aplicación más efectiva de las directrices de la UE sobre los derechos humanos.

Convertir el control de las armas pequeñas en un tema clave para 2006 y realizar el trabajo necesario para reforzar el Código de Conducta de la Unión Europea en materia de exportación de armas.

Dirigir a la UE para que ayude a garantizar que se establece el Consejo de Derechos Humanos de la ONU en tanto que órgano efectivo durante la primera mitad de 2006.

Iniciar una revisión exhaustiva de la política global de la UE en materia de derechos humanos y garantizar la creación de grupos efectivos de trabajo del Consejo para ocuparse de los derechos humanos dentro y fuera de la UE.