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25 de diciembre del 2002 |
Las deudas no son una fatalidad (I)
Jürgen Kaiser (*)
El 27 de febrero de 1953 fue un día histórico para la República Federal de Alemania (RFA). Ese día fue firmado en la capital inglesa el "Acuerdo de Londres ",por partes contratantes que no hacía mucho habían sido enemigos de guerra:la jóven República Federal,sucesora de la Alemania de Hitler por un lado y los aliados occidentales por el otro,representados por Inglaterra, Francia y los EE.UU.,como así también por otros países acreedores,en total más de 20 estados.
El Acuerdo de Londres,con sus condiciones extraordinariamente humanas para la altamente endeudada Alemania de posguerra, contribuyó enormemente al Milagro Alemán de los años 50 y 60 como así también a una rápida reconstrucción del país.El Acuerdo de Londres es aún hoy uno de los pocos ejemplos históricos que muestra cuán cauteloso y sostenible puede ser el manejo de la deuda cuando existe voluntad política. En el caso de Alemania hubo un interés muy grande de parte de Occidente en estabilizar el país política y económicamente lo más rápido posible para que sirviera como "bastión contra el comunismo."La RFA experimentó en ese tiempo la variante positiva de un manejo internacional de la deuda. Exactamente lo contrario ocurre con los países del Sur desde el comienzo de la crisis de la deuda en los años 80 se les exige el pago de la deuda y el cumplimiento de medidas de ajuste que los hunde cada vez más en la pobreza. Este texto se basa en extensos trabajos anteriores elaborados entre el 45 Aniversario del Acuerdo de Londres el 27 de febrero de 1998 por la "Campaña Jubileo 2000 "(creada en 1997)y el año 2000,proclamado como año del "Jubileo "(Autores:Friedel Hütz-Adams y Philipp Hersel).Ya una década antes de la campaña,en el año 1987, el científico Thomas Kampffmeyer del Instituto Alemán para el Desarrollo (DIE)había publicado un estudio pionero, ue se cuenta también entre las bases de este texto. Una mirada histórica al Londres de 1953 muestra que en la actualidad, como entonces, hay otros Caminos.Las deudas no pueden convertirse en trampas que no tienen salida.Esto sirve de inspiración para el presente y vale la pena recordar detalladamente aquel acontecimiento tal como lo hace este texto.Tanto más cuando la RFA -entonces peticionante y deudora, en muchos sentidos -se convirtió en uno de los más poderosos acreedores de los países del Sur. Como ya ocurrió en años anteriores,la RFA se sentará en la mesa de negociaciones cuando se firmen los acuerdos de la deuda del 2003,50 años después de Londres.Desde este trasfondo, la memoria histórica está señalando a Alemania hoy, una obligación frente a los países del Sur.
1.Información básica U na Alemania destruída por la guerra y que además había experimentado el desmantelamiento de una parte de su industria,no podía afrontar los pagos de su deuda externa pública durante los primeros años de posguerra. Por ese motivo, ya en diciembre de 1951 EE.UU.,Inglaterra y Francia habían negociado con ella una reducción de los pagos en el marco de la ayuda económica concedida después de 1945. Sin embargo, esta reducción sólo podía ser efectiva si la RFA acordaba también un arreglo respecto de sus deudas de antes de la guerra. Para poder lograr una solución amplia, había que volver a regular en una conferencia central todas las deudas de preguerra del Imperio Alemán, de sus Estados integrantes y de personas privadas con estados,bancos privados, como así también empréstitos de inversionistas privados. Aún cuando esta conferencia sólo se ocupó de las deudas anteriores a la guerra, tuvo la posibilidad de regular todas las obligaciones de pago de la RFA, a raíz de los compromisos emanados de los acuerdos ya fi rmados en vistas de los objetivos perseguidos.En ese sentido -y además porque las deudas de preguerra se componían de una serie de acuerdos individuales sobre distintos créditos y préstamos- se debería hablar no del sino de los Acuerdos de Londres. La conferencia sobre las deudas anteriores a la guerra tuvo lugar en Londres del 28 de febrero al 8 de agosto de 1952,con un único receso de seis semanas. Participaron en ella representantes de 22 países acreedores (otros tres países mandaron observadores), el Banco de Pagos Internacionales (BIZ),como así también representantes de los acreedores privados. Los principales impulsores de las negociaciones fueron los EE.UU.Entre otros objetivos (1) ,ellos querían evitar que una discusión prolongada y creciente acerca de las viejas deudas de la RFA impidiera su acceso a los mercados de capital internacionales y el país se viera obligado a solicitar créditos públicos a los EEUU (2) . Las reclamaciones a la RFA negociadas por los gobiernos y los acreedores privados en el Acuerdo de Londres estaban constituídas por dos componentes: -Créditos que Alemania había tomado en tiempos de la República de Weimar para cumplir con los acuerdos de reparación emanados del Contrato de Versalles de 1919, cuyos pagos habían sido reestructurados dos veces y más tarde reducidos parcialmente.Según los acuerdos de Londres éstos ascendían a 7,7 mil millones de marcos alemanes.A ello se sumaban deudas de otras instituciones públicas y de deudores privados alemanes que ascendían a 5,8 mil millones de marcos. Es decir, la deuda total anterior a la guerra fue fijada y negociada en la suma de 13,5 mil millones de marcos alemanes (3). -Créditos que la RFA había recibido de los poderes occidentales después de la Segunda Guerra Mundial, principalmente de EEUU, para financiar la reconstrucción. Estos ascendían a alrededor de 16,2 mil millones de marcos alemanes. En total,en Londres se negoció por una deuda externa de 29,7 mil millones de marcos alemanes. Se debe tener en cuenta que el monto de las reclamaciones anteriores a la guerra ya eran el resultado de amplias concesiones hechas a Alemania.La suma de 132 mil millones de marcos oro solicitada originalmente por la Comisión de Reparación de los Aliados al Imperio Alemán (4) había sido ya sustancialmente reducida gracias a la reestructuración de la deuda surgida del Plan Dawes y del Plan Young, antes de que la "moratoria Hoover "de 1932 lograra que prácticamente todas las obligaciones de pago pendientes fueran levantadas. Con ello, al Imperio Alemán sólo le restaba pagar las deudas de préstamos y créditos que había tomado antes para afrontar los pagos de obligaciones contraídas hasta ese momento (5). En el propio acuerdo fueron reducidas tanto las deudas anteriores como las posteriores a la guerra en un 50 % respectivamente. Quedó un remanente de deuda de 14,5 mil millones de marcos alemanes.Finalmente sobre el remanente se concedió una reducción de los intereses:2,5 mil millones de marcos alemanes quedaron totalmente liberados del pago de intereses, 5,5,mil millones fueron gravados con un 2,5 % y los restantes 6,3 mil millones de marcos con un promedio de 4,5 y 5 %de intereses. No se consideró el cobro de intereses compuestos del largo período de no pago. El plan de pago acordado en Londres preveía en primer lugar cinco años (de 1953 a 1957) libres de amortización, durante los cuales deberían hacerse efectivos intereses por una suma anual de 567,2 millones de marcos alemanes. A partir de 1958 se acordaron plazos de intereses y amortizaciones fijos que ascendían a 765 millones de marcos alemanes. Para garantizar una regulación unitaria y uniforme para todos los deudores y acreedores se acordó un trato igualitario para todos.Todos los poseedores de reclamaciones debían aceptar reducciones de igual valor por intereses y amortizaciones. Todos los deudores no públicos disfrutaron de la misma reducción, concedida por sus acreedores a la RFA teniendo en cuenta el interés de garantizar su capacidad de acción económica (6) .
Notas
(*) Jürgen Kaiser es coordinador político de la Alianza Nacional orientada al desarrollo "erlassjahr.de - Entwicklung braucht Entschuldung" (Jubileo.de - Desendeudamiento para el Desarrollo).
(1) La RFA,como país fronterizo con regimenes comunistas,debía ser consolidado política y económicamente.
Además EE.UU.tenía la esperanza de que Alemania volviera a organizar un ejército y aliviara con él en Europa a
su,en Corea,beligerante ejército.También se debía expandir la producción económica de la creciente economía
alemana y con ello cubrir parcialmente una potencial falta de bienes surgida a raíz de la conversión de fábricas
estadounidenses a la producción de armamentos podría y que podría causar infl ación. |
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