Ana Pérez Cañamares: Cuentos más largos que la vida

«Me convenzo ahora de que la brevedad es una entelequia
cuando leo una línea y me parece más larga que mi propia vida,
y cuando después leo una novela y me parece más breve que la muerte.»
-Gabriel Jiménez Emán-

Aunque pueda no parecerlo, el relato hiperbreve es un viejo conocido. Podemos rastrearlo en libros antiguos como la Biblia, o en recopilaciones de relatos orientales; así como en su relación de parentesco con géneros como los aforismos, los poemas en prosa, los haikus, las greguerías...

En su forma actual se encuentra entre nosotros desde los movimientos de vanguardia de principios del siglo XX, que comenzaron a favorecer la tendencia al despojamiento, la sencillez y desnudez, la eliminación de retórica, ornatos y redundancias, en favor de la brevedad y la experimentación formal y verbal. Aunque no ha sido hasta las últimas décadas del siglo pasado cuando el género ha vivido una auténtica eclosión, sobre todo en Hispanoamérica, y cuyos ecos han llegado hasta España, con algunas recientes publicaciones de antologías dedicadas a él.

En su esencia está el carácter híbrido, heredero de sus múltiples influencias, y por supuesto la brevedad, característica principal de la que se derivan otras como la concisión, ya que su efecto se basa en la eficacia y economía de las palabras, su capacidad de insinuación, la elipsis, la exigencia de un lector activo que hace su propia aportación al texto, lo completa, recrea y le sirve de caja de resonancia.

Es frecuente en el relato hiperbreve el recurso a la reescritura, la reelaboración de otros textos, mitos, personajes, bien sea en forma de parodia o de homenaje. Gusta también este tipo de relatos del tratamiento humorístico y/o fantástico de ciertos temas. Por todo ello, se trata de un género juguetón y omnívoro, que se alimenta de cualquier influencia susceptible de reinterpretación.

Valga como ejemplo la siguiente selección, muestra de la fértil variedad y riqueza de un género que oculta, tras la humildad de sus escasas líneas, universos plenos de intensidad y significado.